Últimamente, el cesto de las
revistas de casa está lleno de folletos de juguetes, y eso que ya no vive
ningún niño en casa, pero se guardan por inercia, supongo. Los diferentes
hipermercados y tiendas de juguetes llevan semanas buzoneando estos catálogos más
gordos de lo normal y especialmente dirigidos al público infantil. Recuerdo
que, cuando era pequeño, me hacía mucha ilusión cada vez que llegaba uno nuevo.
En cuanto lo pillaba, me ponía a examinarlo cuidadosamente y marcaba con una
cruz las cosas que quería para los Reyes. Después, muy sutilmente, como quien
no quería la cosa, se lo dejaba caer a mis padres y, con un poco de suerte,
esperaba que el día seis por la mañana hubiera en mi salón algo de lo que había
marcado.
Estos recuerdos me han traído también
a la mente todos esos productos de alimentación que formaron parte de mi
infancia. Quizás porque eran los que más me gustaban o los que más deseaba, la
mayoría de los que permanecen en mi memoria son dulces o chucherías. A algunos
hace mucho que les perdí la pista, por lo que es probable que ya no se
fabriquen o hayan cambiado de marca.
Cada mañana comenzaba el día con
los cereales “Miel Pops”, los recuerdo especialmente en invierno, con leche
caliente. También solían ser habituales los “Smacks”, que venían en una bolsa
plateada. Ambos dejaban la leche con un rico sabor a miel. En verano, era
bastante insistente con mis padres para que compraran el formato de tres kilos
de Cola Cao, no porque fuera adicto al cacao soluble, sino por el obsequio que
contenían estos packs: la “Baticao”. Hubo varias versiones, yo llegué a tener
dos o tres, incluso hubo una que tenía un micro, “Karaocao” se llamaba.
A media mañana, cuando tocaba la
hora del recreo, había un rey indiscutible: el “Bollycao”. Como se trataba de bollería industrial, mi madre solo me lo compraba de vez en cuando, yo siempre llevaba un bocadillo o una fruta, así que me limitaba
mirar como el resto de compañeros disfrutaban del suyo y, sobre todo, de los
cromos. Había una gran variedad, creo que más que ahora. Así, a voz de pronto,
recuerdo el “Bollycao bombón”, que era igual que el normal pero completamente
cubierto de chocolate; y el “Bollycao Mix” cuyo
relleno estaba divido en dos, por una parte chocolate y por otra crema
de leche. Después estaba la “serie b” de esta clase de bollos, eran los
“Bimbocao”, de los cuales creo recordar que existía una versión que traía el
bollo sin relleno y con una pequeña tableta de chocolate adjunta.
Los fines de semana, cuando comía
en casa de mi abuela, solía tener siempre en la nevera gaseosas “La Valleja”.
Ya no es muy común, pero antes había muchas marcas locales de gaseosa
repartidas por España. Algunas desaparecieron y otras fueron absorbidas por
multinacionales. De postre, recuerdo los yogures “Casper” de Danone que sabían
a… ¡cola!. Creo que no he vuelto a ver yogures de ese sabor desde entonces. En
verano, era el tiempo de los helados, mi preferido era el “Negrito”, un cono de
chocolate y nata cubierto de una capa de chocolate con cacahuetes. Ya en el
apartado de los polos, recuerdo los “Boomy”, que eran de tres sabores al mismo
tiempo: fresa, limón y naranja. Cada
sabor estaba representado con la forma de la fruta correspondiente.
Por
la tarde, cuando salía a la
calle a jugar, era el turno de las chuches en el kiosco, básicamente los
domingos.
Recuerdo los kikos “Churruca”, los “Jumpers” o las bolsas de Matutano,
las
cuales valían 25 pesetas y traían los famosos “Tazos”, con los que
después te
echabas unas partidas con los amigos. Normalmente la propina solo me
daba para
comprar alguna de estas bolsas y, como mucho, me sobraba algo para algún
chicle
“Boomer” (que los había de sabores tan geniales como natillas o coco),
caramelos “Vampiro” o piruletas “Fiesta”. El día que tenías 100 pesetas
te
sentías todopoderoso y podías aspirar a un “huevo Kinder” (de los que
aún conservo las colecciones completas de los hipopótamos y las
tortugas) , un “Push Pop” o un
“Kilométrico Boomer”. También existía algo que hoy en día sería
impensable, las
cajetillas de cigarros de chocolate, con los que jugabas a ser mayor.
Y así podría extenderme durante tres o cuatro post, pero sería muy cansino y, además, estoy seguro que se me quedarían un montón en el tintero. ¿A vosotros también os gustaban algunos de estos productos? ¿Cuáles eran vuestros preferidos?
que recuerdos de mi infancia, aunque termino hace poco y por suerte hay productos que todavia estan como los yogures pascual que son mas grandes y cremosos que los danone y me los daban en el comedor del colegio, los cigarrillos de chocolate que todavia venden en algunos sitios, el chocolate jungly..... pero este año han quitado el frigo pie por un frigo dedo y no es de helado si no de hielo
ResponderEliminar¿Sigue habiendo Yogures Pascual? Pensaba que ya no existían. Recuerdo que no hacía falta meterlos en la nevera ¿o los estoy confundiendo con los PMI?
Eliminaryo me e comido uno hoy mismo asi que siguen esistiendo (aunque no en mi nevera), las natillas tambien las siguen vendiendo incluso de los yogures vender versiones de mas cremosas, con trozos y desnatados (y no llevan edulcorantes, engordan mas que los danone pero son mejores)
Eliminarpor cierto un dia mi padre me comento que antes tulipan hacia como una especie de nocilla, eso es cierto?
EliminarNi idea. Creo que nunca he visto una crema de cacao de Tulipan. ¿Sería algo parecido a la crema de cacao de Philadelphia?
EliminarSi,creo recordar que se llamaba Tulicrem y creo que había de chocolate solo y otra que era de tres sabores chocolate,fresa y creo que vainilla pero no era parecida a la nocilla,aunque también era para untar.
Eliminarla trisabor la e visto en mercadona pero de otra marca,aunque no esta muy buena, gracias el nombre era una de las cosas que mi padre no se acordaba
EliminarHola!!!
ResponderEliminarCuántos recuerdos, la verdad es que yo no conozco ninguno de todos los dulces que mencionas, pero la entrada me encantó, digamos que también tengo mis recuerdos, qué bien se siente despejarse un rato con entradas como éstas, me quedo encantada a seguirte y no me perderé lo que publiques, muchas gracias por visitarme!!
Besos
¡Gracias! Es normal que no los conozcas, son casi todos productos españoles. Los "Bollycao Bombón" eran iguales que los "Negrito" que cocinaste el otro día. Aquí el "Negrito" era un helado de Frigo (Heartbrand) ¡Besos!
EliminarParece que yo me tengo que remontar un poco mas atras,jeje,yo recuerdo con nostalgia un bollo que se llamaba mi merienda y creo que era de Bimbo,venía en el paquete un bollo tipo Bollycao y una cholatina.También recuerdo las tardes sentado viendo la tele,entonces solo había dos canales,comiendome mi tableta de chocolate con arroz inflado Crunch, y aquellas chucherías que costaban 1 peseta,los Boomer de chocolate, estas entradas que te transportan a la infancia me encantan.
ResponderEliminarSí, a esos bollos me refería, no me acordaba como se llamaban. La verdad es que cuando yo era pequeño el "Mi merienda" era un poco marginal, el que reinaba era el "Bollycao". Había mil sabores de chicles Boomer y recuerdo que venían envueltos en una especie de papel, no en plástico. ¡Qué recuerdos!
EliminarMalditas entradas que hacen a uso sentirse viejuno! >.<
ResponderEliminarAñoro muy mucho los helados Boomy de Frigo :(
Recuerdo cuando los helados era más baratos y los más caros de entonces costaban... 200 pesetas (ahora eso es 1'20€... una vergüenza)
Creo que soy algo más joven que Mojete, pero yo también recuerdo chucherias a peseta (eran garbanzos, guisantes y demás legumbres de azúcar), y recuerdo la llegada de Telecinco y Antena 3 a la televisión. Tuvimos que resintonizar la antena xD
Como tu bien dices, se pueden hacer muchas entradas de este tema y aún se quedarían cosas en el tintero
Recuerdo cuando apareció el Bollycao mix que me parecio una gran novedad, aunque en casa los comprabamos en paquetes de 4 (como ahora), y en cada bolsa individual ponía bollycao en blanco muchas veces xD
Las bolsas de matutano de 25 pesetas eran "Precio Joven" y te venía de regalo gomas de borrar en su interior. Recuerdo que había el leopardo de los cheetos actuales, cheetos que por otro lado entonces estaban representados por tres tipos de ratones ya que tenían sabor a queso
Jaja, sí, recuerdo perfectamente esos helados de 200 pesetas, que me parecían una fortuna, eran los que siempre estaban en la parte alta de los carteles, jeje
EliminarA mí el Bollycao que más me gustaba era el "Bombón", con envoltorio dorado y opaco. El "Double Choc" que venden ahora no tiene nada que ver.
También recuerdo que, a pesar de su precio joven, las bolsas de snack de Matutano eran de las más caras, aunque es verdas que traían un obsequio.